17 agosto, 2015

¡Nos vamos a Somoslega.com!

Después de un año escribiendo en este espacio sobre algunas de las victorias más bonitas del regreso a Segunda de mi C.D. Leganés, 'La Chilena Del Ascenso' se traslada a somoslega.com. Espero que como yo, hayáis disfrutado de este humilde blog pintado de verde pepinero y lleno de palabras, que no son otra cosa que sentimientos escritos. Ahora, os invito a seguir disfrutando en el nuevo proyecto de Hora Blanquiazul. ¡Allí nos vemos! 


08 junio, 2015

El placer fue nuestro

Ni tras cuarenta y dos jornadas disfrutando en ella me canso de repetir que somos de Segunda. Hace ya casi diez meses escribía las primeras líneas de esta aventura. Volvimos para quedarnos, y así ha sido. El Leganés se salvó jornadas atrás, y perdió, de hecho, la posibilidad de hacer historia al dejar escapar el tren de los playoffs. Pero no ha sido hasta el pitido final del último partido, cuando uno se da cuenta de lo que hemos conseguido.
El Lega cerró la temporada sin jugarse más -ni menos- que igualar la mejor clasificación de su historia en la categoría. No lo consiguió porque empató contra un Zaragoza que se jugaba esa última plaza disponible para entrar en los playoffs. Los maños llegaron con la batería a medias, y se marcharon con las pilas agotadas por un Leganés exigente, pero con una sonrisa de oreja a oreja tras conseguir lo que querían.  Mientras ellos celebraban haber superado el primer escalón de los tres que les separa de Primera, nosotros aplaudimos a los nuestros, y a los que a partir de mañana dejarán de serlo.

Chuli besó nuestra casa con su undécimo gol -pichichi pepinero-, en un gesto de agradecimiento hacia el club que le ha devuelto la vida. Media temporada le ha servido para hacerse un hueco en nuestra memoria durante mucho tiempo, y creo que en la suya el nombre de 'Leganés' tampoco desaparecerá fácilmente. El abrazo de Fran Moreno fue el de todos nosotros. Otro que se llevará consigo un pedacito de corazón pepinero es Eraso, ese cachorro que se ha convertido en león, y que con sus ocho goles, al igual que la temporada pasada, volvió a enamorarnos con su fútbol, su sencillez y su humildad. Es un tópico, pero es la verdad. El bueno de Erik Morán, el guepardo de Diego Aguirre, el eléctrico Bryan Rabello o el pulpo Serantes también vuelven a sus otras casas. Otros no renovarán, otros podrán irse. 

Quizá alguno regrese, como regresan los enamorados. Porque si algo ha hecho el Leganés esta temporada ha sido enamorar. Culpa de ello tiene un Asier Garitano que ya ha renovado otros dos años, alargando el proyecto que podría haber acabado como ciclo esta temporada. Afortunadamente para nosotros no ha sido así. Décimos, con 56 puntos, es el límite a superar para seguir creciendo en una categoría a la que regresamos firmando salvarnos en el último segundo, del último partido, si hacía falta. Ingenuos. Nos vemos en la decimotercera. 

16 mayo, 2015

Despertados antes de tiempo

Cuando parecía que recibir al Sabadell era el partido más asequible de los "cinco para soñar" que le quedaban al Leganés, llegó un empate que aleja el sueño. El 'Lega' fue mejor, lo intentó más veces y tuvo la pelota más tiempo, pero no ganó en el sitio más importante: el marcador. (Leganés 1-1 Sabadell)
El Sabadell venía a Butarque en plena lucha por la salvación, y a falta de cuatro partidos sigue inmerso en el pozo. Los de Juan Carlos Mandiá lo tienen difícil si siguen jugando como ante los pepineros, no sólo porque no ganaran, sino porque poco hicieron para ello. Cierto es que las bajas de Collantes, Hidalgo y Juanjo son notables, pero el equipo que realmente parecía jugarse la vida fue el 'Lega'. Incluso Axel Torres, que se dejó ver por Butarque, se desesperaba con cada mala acción arlequinada. Y quizá esa es la decepción. El Leganés jugó como tenía que jugar para ganar, para luchar por ese sueño que Garitano y los suyos se han ganado a pulso esta temporada. Y ante un rival cuyas constantes vitales eran prácticamente lineales, el 'Lega' no pudo pasar del empate en casa. No sirvió ni siquiera que el partido empezara a pedir de boca.

Postigo encontró lo que llevaba buscando toda la temporada, un gol de cabeza. Llegó en el minuto once de una primera parte dominada por el Leganés. Cómodo, sin sobresaltos, llegó al descanso. Todos nos frotábamos las manos por las buenas sensaciones. Ni siquiera hubo lugar a la resignación por haber perdonado algún que otro gol, como el que Aguirre hubiera marcado si no fuera por Nauzet. De repente, por sorpresa, de la nada, llegó el gol de Eguaras. Pasaban tres minutos del comienzo de la segunda parte, y un despeje tan innecesario como horrible de Soriano no pudo acabar peor. Incluso ahí, la preocupación fue mínima. Quedaba toda la segunda parte, y el Lega seguía siendo superior.  El gol tenía que llegar. Pero los minutos iban empujando el partido al abismo, y el Lega no marcaba. Garitano, que después del gol del Sabadell no quiso esperar más, introdujo a Rabello y Velasco en busca de oxígeno y poder en ataque, y más tarde a Fran Moreno en busca de altura, y más frescura. Los pepineros lo intentaron como cuando llega el gol. Era cuestión de tiempo. De un tiempo que se acabó. 

Nos topamos con un empate inesperado que ciertamente chafa las ilusiones creadas durante la semana. Los playoffs se alejan, y aunque la posibilidad sigue ahí, quizá es el momento de disfrutar sin objetivos. Para divertirnos con Chuli, con Eraso, con Aguirre o con Garitano. Quién sabe lo que pasará a partir del 30 de junio. De momento, valoremos lo que sigue siendo una bendita locura: jugar los últimos cuatro partidos de una temporada en Segunda, sin presión ninguna. En la gloria.

10 mayo, 2015

Lo logramos

Lo logramos. El Leganés sumó 50 puntos y será de Segunda un año más. Ahora quedan por delante cinco partidos para disfrutar sin la presión de poder caer, y con la ilusión de querer hacer historia. (Leganés 2-1 Las Palmas)
Las Palmas no llegaba con la sintonía futbolística con la que ganó en la ida. Ha perdido carácter a domicilio, tanto que en las últimas nueve salidas no ha podido ganar. El Leganés lo sabía, y volvió a convertir Butarque en un fortín para complicarle la vida a los amarillos, y corroboró las palabras de Paco Herrera, en las que dijo que éste iba a ser el partido más difícil de los seis que le quedaban. Correcto, porque tras el tostón de la primera parte -quizá más por el solazo que nos hizo a más de uno convertir un papel en parasol, y otro en abanico-, en la segunda llegó el desfase.

Prendes abría el marcador a los seis minutos después de un contraataque de libro. El asturiano pasó a la historia logrando el gol 500 del Lega en Segunda División. Lástima que tengamos que recordarlo por su primer gol de blanquiazul, y no por su enésimo. Ni a pensar en eso dio tiempo, porque al minuto Simón empató el partido. El ánimo volvió a relajarse, y se temió lo peor cuando Viera penetró en el área y remató... al palo. Susto del que el Leganés se repuso con garra y fútbol, para impedir que el arreón canario matara el partido. Todo se volvió más intenso, más vivo, más emocionante. Poco a poco el Leganés volvió a retomar el control, y de la nada Chuli se sacó el segundo. Obra de ratón de área, de genio, de killer. Hasta en Las Palmas se escuchó el rugido de Butarque cuando el speaker Bermejo cantó eso de "¡con el número doce...!". El mazazo fue definitivo para los de Paco Herrera, y el Leganés parecía el equipo grande y experto, controlando los tiempos con maestría.

Pitido final, y 50 puntos que se celebran con un grito parecido al de Cristiano Ronaldo. Un 'Sí' muy alto y muy largo. Mitad de tabla, y cinco jornadas para saborear lo conseguido e intentar hacer historia. Siempre nos gustó tener a mano las guindas. ¡A por ella!

04 mayo, 2015

No acierto, no party

No hubo sorpresa en Zorrilla. El Valladolid no fue superior pero plasmó esa característica intrínseca de los equipos denominados 'grandes'. La de marcar a pares incluso cuando no haces tu mejor partido. (Valladolid 2-0 Leganés)
Decía Garitano en la previa que el equipo necesitaba creer para poder hacer un gran partido. Un argumento idéntico al que utilizó el Leganés antes de enfrentarse al Betis. El Valladolid, claro, estaba avisado de aquel precedente y no se dejó poseer por otra creencia pepinera. No fue un mal partido del Leganés, pero tampoco el mejor. Desde las cabinas del Jozé Zorrilla se vieron fases de poco dinamismo, de lentas transiciones y de poca verticalidad. Argumentos, aún así, válidos para hacer frente a todo un Valladolid en su estadio, con un Erik Morán espléndido, pero quizá escasos para ganarlo. 

El Valladolid, sin sacar lo mejor de sí, logró imponerse. Álvaro Rubio abrió la lata tras un remate de cabeza en el rechazo de un balón parado. Un gol poco vistoso, fiel al día vallisoletano. Chuli tuvo la réplica en un mano a mano que se la marchó muy desviado. Fue la mejor ocasión pepinera, en el día en el que Rabello debutaba como titular. El chileno es ahora un jugador más versátil que el que llegó en enero, pero no aprovechó los minutos brindados. La segunda parte fue más de lo mismo, con una nueva oportunidad de Chuli, esta vez de cabeza, que supuso una gran mano de Varas. La diferencia de acierto fue el mejor resumen del partido. El 'Lega' lo intentaba, pero el resultado a favor de los pucelanos les daba una inercia favorable con la que llegó el penalti. Rubén Peña derribó a Óscar, y Roger batía a Serantes (Serrantes, según, una vez más, el marcador visitante). Derrota bajo la lluvia, y a casa. Lástima, sobre todo, por la afición blanquiazul, la única que quiso ser el jugador número doce.

Tres partidos consecutivos sin ganar acumulan los pepineros, pero aún a once puntos del descenso. Es la renta que está permitiendo al Leganés vivir este tramo final de Liga con cierta tranquilidad. Cuatro de los próximos y últimos seis partidos serán en Butarque, empezando por recibir a Las Palmas. Otro 'grande' que aún no sabe lo que es Butarque. Buena oportunidad para sellar los 50 puntos.

18 abril, 2015

Diez minutos de sueño

El Leganés mereció como poco puntuar en Montilivi. Dominó a todo un Girona, pero la puntería de Jaime Mata y la eficacia de Sandaza tiraron por tierra todo el trabajo pepinero. (Girona 2-1 Leganés)
Soñó el Leganés con un puesto en los playoffs durante diez minutos. El tiempo que transcurrió entre el gol de Chuli y el del empate de Mata. El Leganés se colocó sexto momentáneamente después de una primera parte en la que nadie consiguió marcar, pero que tuvo como principal reclamo la clase de buen fútbol que desplegaron los pepineros. El Girona estuvo supeditado por los blanquiazules, a pesar de la escasez de ocasiones. Fue en la segunda parte cuando se le echó salsa, y llegaron los goles. 

Un pase de Álvaro García dejó solo a Chuli, que utilizó doblemente la puntita del pie para guisárselo y comérselo. Primero, para hacerse un autopase ante la salida de Becerra, y después, para rebañársela a un Richy despistado que creyó haber solventado el problema. La portería estaba en la dirección que tomó la pelota, y Chuli no tuvo que hacer más que ir a celebrarlo con una nueva reivindicación hacia los escépticos del sur. Ya van ocho. 

El Lega había conseguido materializar esa superioridad, pero quedaban casi cuarenta minutos de partido. Los de Asier Garitano buscaron el segundo, pero el Girona no se empequeñeció ni dudó de sus posibilidades a pesar de que no estaba siendo su mejor partido. Con un balón colgado desde la izquierda, Jaime Mata consiguió batir a Serantes diez minutos después del 0-1, con un sutil y magistral toque de pie. A partir de ahí, la inercia local fue difícil de frenar, y Pablo Machín introdujo a Sandaza, que si algo sabe hacer bien es oler la sangre. La primera que tuvo, la coló. Eficacia similar a la que condenó al Leganés en Butarque, y con la que permitió a su equipo llevarse nuevamente los tres puntos. Las derrotas abultadas se le siguen resistiendo a un Leganés que dejó gran sabor de boca en tierras catalanas. Toca ganar al Mirandés para seguir soñando.

13 abril, 2015

Todo es posible

Nunca antes el Leganés había estado tan lejos del descenso. Ahora, a falta de nueve jornadas, el casi cumplido reto de la permanencia parece dar paso a otro mucho más difícil: el de no pensar en los playoffs. (Leganés 2-0 Albacete
No hicieron falta ni más de tres palabras para explicar el partido. "Ganó el mejor", sentenció el técnico del Albacete sin más rodeos en la conferencia de prensa. Así fue. Volvía el Lega a Butarque después de tres partidos contra Alcorcón, Sporting y Numancia en los que no demostró la superioridad que sí tuvo ayer. Los de Garitano pudieron hacer mejor su fútbol a merced de un Albacete que jugaba y dejaba jugar. Había más espacios y el Leganés se sentía más cómodo. El trivote siguió funcionando a la perfección con un Diamanka de nuevo omnipresente; la defensa de Postigo y Mantovani mantienen más seguro al ya de por sí seguro Serantes, y en la delantera, el '12' sigue con hambre. 

Todo funcionó bien ayer en Butarque, salvo el césped. Quizá por ello los goles llegaron de una forma menos directa de lo previsible. El primero, un regalo de Dorronsoro por no medir dos centímetros más, y el segundo, otro obsequio de Antoñito al llegar tarde a un balón en el área. Era difícil llegar antes que Diego Aguirre. 2-0 en 30 minutos, y la mejor primera parte pepinera desde el baile del Villamarín. La segunda tuvo a un 'Lega' más relajado, y a un Albacete más revolucionado. Un error, de no ser por la falta de acierto visitante. El césped -o el barro- volvió a hacer de las suyas, y evitó el gol albaceteño cuando Chumbi había metido la pierna para rematar un centro-chut de Keko. Los continuos botes de la pelota hicieron que ésta siguiera su camino por debajo de la pierna del delantero del 'Alba', y pasara de largo ante la portería de Serantes. En serio, vean la repetición. 

El Leganés no fue capaz de aprovechar el riesgo que asumieron los albaceteños, y los flojos contraataques no sumaron el tercero. Poco a poco la esperanza visitante se fue apagando, y el tiempo murió con una nueva victoria pepinera. La permanencia se empieza a tocar con algo más que la yema de los dedos, aunque a Garitano aún le falten cuatro puntitos más. Van 46, a +14 del descenso y a -3 de playoffs. Una ventaja más que saludable bajando los ojos, y una desventaja esperanzadora levantando la mirada. En el horizonte está el Girona, pero ustedes deciden hacia donde mirar. Pueden hacerlo, porque aún todo es posible.